En un inesperado suceso que ha afectado a millones de usuarios, la empresa de ciberseguridad CrowdStrike se ha visto involucrada en un problema técnico significativo que ha provocado la temida «pantalla azul de la muerte» (BSOD, por sus siglas en inglés «Blue Screen of Death») en computadoras con Windows.
El origen del problema está relacionado con un fallo en el sensor Falcon de CrowdStrike, un componente esencial de su software de seguridad. Este problema ha causado que numerosos equipos con Windows entren en bucles de reinicio y errores críticos, impidiendo su correcto funcionamiento. Microsoft ha reconocido el problema y está trabajando en colaboración con CrowdStrike para mitigar los efectos y restaurar la funcionalidad de los sistemas afectados.
Diversos sectores afectados
El sector aéreo ha sido uno de los más perjudicados. American Airlines, junto con otras aerolíneas, ha tenido que detener sus vuelos temporalmente debido a problemas en sus sistemas de check-in, lo que ha causado largas filas y retrasos significativos en los aeropuertos. Asimismo, aeropuertos como el de Edimburgo han reportado tiempos de espera más largos de lo habitual debido a la caída de sus sistemas informáticos.
Además del transporte aéreo, el London Stock Exchange ha experimentado interrupciones en su servicio de noticias regulatorias, dificultando la publicación de información crítica para el mercado. Otras organizaciones, incluyendo servicios de emergencia y grandes cadenas de restaurantes como McDonald’s en Japón, también han reportado problemas en sus sistemas, exacerbando la magnitud del incidente.
CrowdStrike ha emitido una serie de instrucciones para los usuarios afectados, sugiriendo métodos como el uso del Modo Seguro de Windows para eliminar o renombrar archivos problemáticos del sistema. También se ha recomendado modificar el registro de Windows para desactivar el servicio CSAgent, lo que puede ayudar a evitar los reinicios en bucle causados por el fallo.
CrowdStrike y Microsoft continúan investigando la causa raíz del problema y trabajan en soluciones permanentes para evitar futuras incidencias. Mientras tanto, ambas compañías han instado a los usuarios a seguir las medidas de mitigación recomendadas y han asegurado que se están tomando todas las acciones necesarias para restaurar la normalidad lo más pronto posible.